Conejo en salsa de tomate al estilo de la abuela Isabel

Conejo en salsa de tomate al estilo de la abuela Isabel

Es otro de los guisos tradicionales que se pueden dejar preparados, está mejor de un día para otro. También podemos hacerlo utilizando pollo. Uno de los platos tradicionales que recuerdo con más cariño de mi infancia.

 Ingredientes para 5 personas:

  • 1 conejo (1 ¼ k.).
  • 2 cebollas.
  • 1 pimiento verde, 1 pimiento rojo.
  • ¾ k. de tomates rojos maduros.
  • 4 dientes de ajo.
  • ½ vaso de vino blanco.
  • Sal, pimienta y laurel.
  • Aceite de oliva virgen extra.
  • 6 rodajas de pan y 6 huevos fritos.

 Elaboración:

  • Lavamos bien la carne y la cortamos en trozos pequeños, la secamos bien y la sazonamos con sal y pimienta molida.
  • En una cazuela ponemos un poco de aceite de oliva virgen extra. Incorporamos el conejo. Cocinamos a fuego alto. Debemos de sellar la carne del conejo dorándola bien para que así la carne quede más tierna y sabrosa. Incorporamos los ajos, los pimientos finamente picados y el laurel.  Dejamos cocinar durante unos minutos más a fuego medio.
  • Retiramos la carne, los ajos y el laurel de la cazuela, reservamos en un plato.
  • Picamos la cebolla y la doramos en la misma cazuela, hasta que esté transparente. Cuando tengamos lista la cebolla, incorporamos el vino blanco. Mientras el vino se va evaporando, incorporamos el conejo con los ajos nuevamente en la cazuela. Removemos bien y seguimos cocinando durante unos minutos hasta que se evapore el vino.
  • Añadimos la salsa de tomate frito y ligamos bien con el conejo.  Cocinamos durante 10 minutos. Y ya tenemos el conejo con la salsa de tomate listo para servir.
  • Podemos acompañar el conejo con la salsa de tomate, con unas rebanadas de pan frito y unos huevos fritos.

 Preparación de la Salsa de tomate frito.

El preparar la salsa de tomate frito lleva su tiempo, por lo que recomiendo que hagáis una buena cantidad; la que sobre la conservaremos en el frigorífico e incluso la podemos congelar.

 Ingredientes:

  • 3 kilos de tomates naturales maduros.
  • 1 pimiento verde.
  • 2 cebollas grandes.
  • 2 dientes de ajo.
  • Azúcar.
  • Aceite de oliva virgen extra.

 Elaboración de la salsa y la conserva:

  • Para esterilizar los botes, empezamos por ponerlos en una cazuela grande con agua caliente, sumergimos los botes y sus tapas. Una vez que comiencen a hervir, los dejamos 5 minutos. Los retiramos y los secamos bien una vez que se enfríen. Las tapas las reservamos en el agua, hasta el momento final del proceso.
  • Pelamos los tomates, los lavamos bien y les quitamos los corazones. A cada uno le hacemos un corte en cruz en la parte inferior (luego será más fácil pelarlos) y los escaldamos en agua hirviendo durante varios minutos (2 más o menos), retiramos y los pasamos por agua fría. En cuanto podamos echarles la mano, les quitamos la piel y las partes más duras o estropeadas.
  • Picamos la cebolla en juliana, el pimiento en tiras y el ajo muy fino. Añadimos un buen chorreón de aceite de oliva virgen extra en una sartén o cazuela y comenzamos por sofreír la cebolla 5 minutos a fuego medio. Añadimos el ajo y el pimiento verde y cocinamos otros 5 minutos. Salamos al gusto.
  • Los tomates los cortamos en cuartos, los añadimos a la sartén o cazuela y mezclamos todo con cuidado. Dejamos que se cocine todo durante 30 minutos a fuego medio-bajo.
  • Pasado el tiempo, pasamos todo por un pasapurés. No uséis batidora, ya que machacará demasiado la salsa y la textura final no será la adecuada.
  • Una vez pasados por el pasapuré, la salsa obtenida la cocinamos a fuego bajo unos 60 minutos. Salamos al gusto y le añadimos una cucharada sopera de azúcar, para contrarrestar la acidez del tomate natural. De vez en cuando vigilamos la cazuela y removemos la salsa. Retiramos del fuego y dejamos atemperar.

 Proceso de envasado en los tarros de cristal:

  • Rellenamos los botes con la salsa hasta la zona de rosca, y cerramos bien con la tapa en caliente.
  • En una olla grande con agua caliente, introducimos los votes en vertical, dejando 4-5 centímetros por debajo de las tapas para que no se introduzca el agua.
  • Los mantenemos al baño maría durante 20 minutos, para que así queden cerrados herméticamente. Los retiramos del fuego y lo dejamos enfriar dentro del recipiente. Unos vez fríos, los retiramos y los secamos con un paño. Ya tenemos lista la conserva casera de salsa de tomate frito para cuando la necesitemos.
  • La guardamos en un armario o despensa que sea un lugar fresco y seco. Esta conserva aguantará perfectamente varios meses. En el momento de abrir cada vote, se escuchará un ruido característico “pof” que indicará su perfecto estado de conservación. Una vez abierto y usado, se deberá conservar en el frigorífico, y lo recomendable en consumir la salsa durante los 4-5 días siguientes.

 

Nota: Podemos cambiar el conejo por el pollo. Este plato casero, se ha consumido mucho en aquellos interminables viajes en ferrocarril en la década de los años 50 y 60. Era muy normal, ver a mi familia cuando volvíamos del pueblo de mis abuelos viajando y  consumiendo este plato en aquellos mágicos trenes de madera.